lunes, 17 de marzo de 2025

María Jesús Montero, profeta realista



¿Es posible compaginar estas dos palabras, profeta y realista?  El profeta es lapersona que denuncia y anuncia, la que se vincula a las victimas de la injusticia y de la excesiva desigualdad productoras ambas de la dominación y de la pobreza. La que desde una experiencia honda y duradera de la dignidad incondicional siente la bondad y compasión suficiente para mirar la realidad desde los de abajo y reconstruir una y otra vez la cultura y las estructuras de fraternidad, el amor cívico y la noble labor política.
Realista es la persosna posibilista que a veces tiene que dejar o retardar su radicalidad en función de una mayor operatividad. Muchas veces criticada por su perspectiva acomodaticia generalmente e mas concluyente que el que corre mucho y tropieza. Sin embargo tambien en el camino la dura realidad le obliga a sucesivas claudicaciones de sus ideales.
Pues bien, creo que esa es la imagen de María Jesús Montero, vicepresidenta segunda del gobierno, que se inició en la política desde la comunidades cristianas de base y los “curas rojos”. Le preguntaron si creía en Dios y dijo que sí, que había algo que nos trasciende, pero no el dios tradicional. Su trayectoria, común a otras muchas personas es un alegato a favor de la renovación tan fuerte del cristianismo que se dio en los años 60 y 70. Maria Jesús reclamó la necesidad de la reflexión y el silencio para mantenerse en la acción liberadora.
Quiero analizar la expresión que uso, “Hay algo que nos trasciende” y que nos lleva aun modelo de persona que se está agotando. Es un algo indefinible que si lo encorsetas en un credo deja de ser. Si lo comprendes no es Dios y si lo nombra y manoseas desde la certeza, estás blasfemando, nombrándolo mal. Dios no existe como da a entender éste término según la tradición. Pero “algo” hay en la donación incondicional, en la presencia del pobre y en la acción política en cuanto liberación. 
Algo que nos trasciende, común a todos los seres. De acuerdo con su ser aquí y propio. Algo que nos desborda en nosotros mismos y nos lleva al reconocimiento de la incondicionalidad de los valores humanos y de una dignidad insoslayable de todo lo que hay. Que una mujer con esas convicciones cristianas haya llegado a tal grado de poder es muy importante y también que haya hablado sobre la necesidad de la espiritualidad en nuestro tiempo, sea con el yoga, el mindfulness o la misa. La necesidad de la reflexión, del silencio, de la autocorrección y de la mística activa. Este es el camino.

Santi Villamayor

3 comentarios:

  1. tremendo error judicial en la malaga de maria jesus montero con doña dolores vazquez mosquera. Caracter pusilanime y muy gallego que decia francisco montijano serrano

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  2. maria jesus montero contra la presuncion de inocencia de los hombres

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